Madrid se ha consolidado como una ciudad capaz de preservar el interés social de la vivienda, de impulsar la colaboración público-privada y de definir un modelo de acceso a la vivienda eficiente, asequible y equitativo. Una ciudad que no hace más que crecer y que ya supone uno de los centros financieros más relevantes de Europa.

El aumento de la población, la escasez de oferta y, como consecuencia, el aumento de los precios de la vivienda han enfrentado a la capital ante un gran reto de generar espacios sostenibles donde el conjunto de la población creciente pueda adquirir vivienda sostenible y asequible.

Por otro lado, Madrid tiene también un reto de convertirse en un referente en sostenibilidad. Por ello, la construcción de nuevas viviendas debe tener en cuenta factores como la eficiencia energética, la salud y bienestar de los ciudadanos, la disponibilidad de zonas verdes, la movilidad y las emisiones.

Valdecarros: el mayor ámbito urbanístico de España

Valdecarros, el epicentro de los desarrollos del sureste, aportará equilibrio urbanístico al conjunto de Madrid, ya que contribuirá a mitigar y compensar excesivo crecimiento de la capital hacia el norte y el oeste.

En este nuevo barrio, el mayor del Madrid futuro, cada vecino dispondrá proporcionalmente de una zona verde de 48 metros cuadrados, cuatro veces más de la superficie recomendada por las organizaciones internacionales. Además, contará con todos los servicios necesarios para el ciudadano como guarderías, centro de salud, zonas de oficinas, etc.

El 25% del suelo de Valdecarros es público. Hasta 2039 se lanzarán al mercado un total de 51.000 viviendas entre las cuales 28.000 serán viviendas protegidas lo que contribuirá a mejorar la oferta y el acceso a la vivienda en el conjunto de la población.

“No podemos perder de vista que lo que necesitamos para hacer unas viviendas asequibles es la necesidad de oferta de suelo urbanizado suficiente, que impacte sobre la demanda y frene los precios”, recordaba Luis Roca de Togores en el FORO AHA22 organizado por el Consejo Superior de Colegios de Arquitectos de España.

Una oportunidad única para reequilibrar la ciudad de Madrid al dotarla de importantes zonas de vivienda asequible, equipamientos y extensas zonas verdes.